"Solo un muerto podía quedarse en los 17 años para siempre"
(Haruki Murakami - "Tokyo Blues/Norwegian Wood")
"Aferrado a los bordes del agujero, trató de alzar su cuerpo; fue en ese preciso momento cuando sintió que algo extraño se prendía de sus tobillos. Fue entonces cuando supo que era el miedo; pese a sus desesperados esfuerzos no conseguía desprenderse de la misteriosa fuerza que tiraba de sus pies".
(H.P. Lovecraft - "En la cripta")
"Darío, crédulo como de costumbre, creyó que aquel escenario no se repetiria, que aquel ser aprenderia y de alguna manera no volveria a degradarlo a la misera forma de las cenizas de un cigarrillo. Pero obviamente se equivoco, y fue nuevamente empujado al vacio, a un vacio atroz que lo atormentaria por días, meses e incluso años".
Una característica altamente virósica en el ser humano le permite creer que ciertas circunstancias de la vida no tienen porque ser iguales a otras similares vividas con anterioridad. Llamese "esperanza" o "ilusión" (o incredulidad), el individuo promedio tiende a darle una segunda oportunidad a las cosas (incluso aquellos que tardan en hacerlo o que sencillamente dicen que nunca lo harán). Puede que en dicha ocasión los planetas, supuestamente creados por un hijo de puta, se alineen y conformen una suerte de "suerte" (me cago en la redundancia) y la situación o el momento que antes fue escabroso ahora sea ideal. Si bien esta demostrado que esto sucede (en un 0,00000001 % de los casos), la mayoria de las veces se da al revés, y las segundas partes son malas y/o terribles. Se dice que cuando esto pasa uno se convierte oficialmente en un "boludo". Pero cuando ya pasa reiteradas veces, a tal punto que la vida deja de ser vida, uno definitivamente alcanza un grado de estupidez total.
Basicamente eso le sucedió el Sábado 18 de Febrero a quien escribe estas líneas (que de merca no tienen nada por desgracia). Nuevamente, confiando en la mismísima nada, creyó que algo podía funcionar, que darle otra oportunidad a la misma desgracia podría llegar a tener algún resultado satisfactorio. Y con estas premisas "positivas" el tarado de turno se fue a dormir el día anterior a las 4 am (lo que sucedio esa noche merece un blog entero para ser narrado) para levantarse 5 horas después y dirigirse a la Anicon, otro mas de los insipidos eventos a los que Yamato nos tiene ya acostumbrados.
Una junta del staff de las remeras de colores tuvo lugar lugar meses atrás en un conocido local de comidas rápidas próximo al Paseo La Plaza para decidir el lugar donde se celebraria dicho evento funerario. Curiosamente Carlos Guzman se encontraba con un cuadro diarreico en un mugriento baño de dicho antro y, entre gases, pudo escuchar el diálogo que mantenía Nishi "Puto" Llinas con sus súbditos. Lo transcribimos a continuación:
Nishi (el puto): "ok gente, donde mierda vamos a hacer el evento? Necesito ideas chotisimas y platita, pero ya eh."
Estaf #1 (Mehago, recientemente incorporado): "hagamosla en el centro cultural buen ayre, un lugar pedorrisimo donde los podemos hacer cagar de calor para que compren liquidos (de dudosa procedencia). Ahí está la guita".
Nishi (re puto, encendiendo un habano): "mmm si, queseyo, la verdad es que tenemos tanta gente en el estaf (al reverendo pedo) que no vamos a entrar ahi, y ni hablar del público. Necesitamos un lugar mas grande pero a la vez mas choto".
Estaf #2 (Edu di Costa, desempleado desde que se peleo con Leandro "el gordo" Oberto): "hagamoslo en el Club 947, otro lugar de mierda. Ah si, y llamemoslo a Mc Pio para que pinte a las minitassshhh, miniiiitassshhh (igual me la lastro doblada)".
Nishi (aun mas puto, fumando el habano por el orto): "ah no es mala idea..pero no, despues tenemos que indemnizar a los que mueran bajo la pantalla gigante. Además tendriamos que poner la entrada a $1000, como para Laruku".
Estaf #3 (Michael): "y si la hacemos en el nichia? Es una escuela de mierda en un lugar de mierda, y además esta llena de tumbas".
Nishi: "si...si....SIII (se le quemo todo el orto con el habano) buenisima la idea, me gusto eh. Y para el cronograma de actividades como hacemo'?".
Estaf #1 (Mehago): "y mirá, abrimos las puertas a las 12, ponemos las actividades a partir de las 14 hs, asi los boludos se re cagan de calor y compran agua, sanguches de salame y queso y, en especial, PANCHOS (guilty pleasures), ahi esta la guita. Ah, y le tiramos un chori y una coca al incompetente de los toronja para que la reme en dulce de leche ambas tardes".
En resumen, asi fue. Una convención destinada al fracaso obvio de una "empresa" que no aprende de sus horrores. Quien escribe estas lineas llego tempranísimo, convencido de que habría una fila que enfrentar. Pero nuevamente, y como era de esperarse, se equivoco. Acompañado de un compañero que prefiere seguramente no ser mencionado en esta garcha, atravesó las rejas amarillas de la perdición minutos antes del mediodia. El calor pesaba como nunca. El primer altercado lo tuvo al comprar las entradas: no tenian cambio....
A ver, si pones una entrada a 40 y te compro 4 (cuatro), son 160 mangos...te garpo con 200...es increible que no se prevea esta situación, puesto que con esa guita me encamo en un telo por 13 horas. Pero bien, se trata de yamato, los ignorantes somos nosotros, que no llevamos monedas de 5 centavos en el bolsillo. Preveo que en el futuro contaran con un frasco de caramelos para solventar los vueltos, por ahora ni para eso les alcanza. Luego de haber sorteado dicho impedimento en la entrada, nos dispusimos a ingresar a la casita del horror.
El calor era agobiante. Recordaba a un lejano verano de 2009, cuando un casi difunto Dario firmó un contrato que acabo con su vida. Pero esa historia ya es conocida por todos...
Los "stands" (si se los puede llamar así) dejaban mucho que desear, como de costumbre. Entre la mucha basura a la venta podemos mencionar desde figuras chotisimamente truchas (y chotas) con un precio elevado irrisoriamente hasta la ridicules máxima (o sea, chotos), pasando por katanas, bombachas, cartucheras, ratas, pistolas, vaqueros, damas, guanteros, pistolas, rateros...hasta vello púbico de Bono (crossover), pero nada que realmente valiera la pena.
Las unicas actividades disponibles al momento eran en la sala de proyecciones, con series y películas que, como ya es sabido, nadie mira. El resto de las actividades comenzarian horas después; mientras tanto la principal atracción era ver a los del staff rascándose las pelotas y/o argollas a cuatro manos y al boludo de Toronja remandola como nunca en la conducción. Mención zenkiana de honor a este individuo que por asistir a este evento y prestarse para tan bochornosa tarea de pseudo-anfitrión es igual o mas boludo que nosotros.
Y la verdad, no hay mucho mas que decir. 2 (dos) horas duramos en aquel infierno, rodeado de rincones grises, tumbas y perdición. Por mi parte solo asistí para lograr sacarme una foto con "La Princesa", pero ella fue mas inteligente que todos nosotros y apareció mucho después. Para ese entonces, quien escribe estas líneas se tambaleaba en el borde de la fosa.
Calificación del evento: 0,8 zenkos
La fosa - OffTopic
Las derruidas calles que se abrían delante nuestro lucian un tono ocre bajo ese cielo verdoso que todo lo cubria. Vimos pasar ante nuestros ojos a la nave nodriza, pero en ese momento era preferible continuar nuestro trayecto.
En el recorrido, la silueta del coloso recortada contra el cielo nos recordaba siempre lo mismo, como si de una advertencia se tratase, mas nada ni nadie podria detenernos en ese momento. Ya sabiamos donde nos dirigiamos desde antes de emprender la partida, y teníamos muy en claro que no nos detendriamos bajo ningun motivo.
Nuestra primer escala fue para recargar energías. Nuestros cuerpos pedian a gritos alguna fuente de alimento. En el camino a pie hacia el innombrable reino, sitio de reunion de los muertos, pudimos observar ciertos lugares, fachadas y sitios de gran ominosidad, que también estaban ahi para advertirnos de que estabamos yendo demasiado lejos. Como era de esperarse, no nos importó.
Consumimos lo que cualquier mortal, aunque es bien sabido que a los muertos la comida mundana les termina cayendo mal, mas en un lugar asi. Con nuestros estomagos llenos y nuestra billetera un poco mas vacia, emprendimos nuevamente el viaje hacia el pabellon de la muerte.
En dicho viaje vislumbramos lugares conocidos, entre los cuales estaban la Plaza del Diablo y "el banquito de la desolación", donde dicen que, de noche, pueden escucharse los lamentos de un ser con diarrea.
Pero dios no nos la iba a dejar asi de facil. Casi al llegar a destino una esfinge se apareció en el medio del camino, proponiendonos un simple acertijo para el que nadie tenia animos de contestar. La esfinge, enfadada y aparentemente indignada, se avalanzó sobre nosotros pero se teminó conformando con una simple ofrenda "lanatiana".
El pabellón de la muerte se erigia ante nosotros como una tumba sellada por las arenas del tiempo, esperando a que pusieramos un pie dentro para cerrar sus puertas a nuestras espaldas. Nuestra sed de constante desafio hacia dios y principalmente hacia todos sus "mackiavélicos" retos nos permitio dinamitar las puertas y entrar como si fuera nuestra propia casa (debe de serlo).
Su interior lucía como en los viejos tiempos (después de todo, tres años no son nada). Inmediatamente sentí un leve mareo que atribuí a la nefasta comida que habia ingerido minutos antes. Le quite importancia y seguí firme caminando hacia delante y sin mirar atrás, como aquel día.
Los pisos temblaban bajo nuestros pies, mas la escalera que se erigia ante nosotros lucía una aparente firmeza, invitandonos a subir por ella poco a poco. Antes de que nos diéramos cuenta, habiamos llegado a la cima. Nos encontrabamos en el segundo piso...
"A medida que caminaban por esos pasillos, sentía una rara sensación en su brazo, una presión, una fuerza que lo arrastraba hacia delante. Queria que se detuviera, pero era imposible. Demasiado tarde. En las vidrieras se reflejaba el horror: Dario estaba siendo arrastrado por una fuerza descomunal. De repente se detuvo, miro a sus pies y vio aquella fosa. No sabia nada acerca de su profundidad, pues dicho pozo estaba casi repleto de panchos, pero tampoco podia quedarse con la incognita. Tomó coraje, se agachó y metio la mano dentro para ver si podia palpar algun fondo próximo. Y asi como metio la mano terminó por hundir tambien el brazo, el codo, el hombro. Cuando quizo darse cuenta, Dario estaba hasta el cuello de panchos. Luchaba y luchaba por liberarse pero sentia que cada vez se hundia mas y mas. De repente, una figura emergió desde el fondo del mar de panchos. Su belleza derruia los techos del recinto y volvia arena las vidrieras de los locales. Movia los labios. Parecia estar hablando pero Dario no la escuchaba, no podia escucharla. De repente, una historia conocida: el hermoso ser se precipitó sobre Dario, lo beso, lo abrazó y se lo llevo consigo hacia las profundidades del mar de panchos".
Yo miraba perplejo esta escena desde la superficie. Parado en el borde de aquella fosa sentí una mano agarrando mi tobillo. Mire mis pies. Aquella criatura verdosa sonreía mientras me arrastraba hacia el pozo. Justo cuando estaba por seguir el mismo destino que Dario, una voz conocida dijo "no en mi turno" y disparó con su Gustav. No logró darle de lleno a la criatura, aunque si logró que esta se esfumara dentro del pozo. Su baba verde corroia mi piel como los mismisimos recuerdos, pero ya no importaba. Estaba a salvo, al menos por el momento...
(Continuará)
Written and Posted by Roberto Fantini.
Dedicated to Cesar de la Luz, Carlos Guzman, El Ente (Yui), "dios".
In memoir of Impa's Hair - Requiescat in pace